El niñito lloraba de hambre y estaba junto a
sus seis hermanitos para ser trasladados a un hogar.
La agente de la Policía Bonaerense llegó a esa
habitación por el llanto, el que provenía de un bebé de seis meses, que se
metía la mano en la boca.
La uniformada supo de inmediato lo que pasaba.
“Le dije a la cuidadora que seguro tenía hambre. Le ofrecí darle el pecho y la
chica emocionada me dijo que sí. Le di la teta y se calmó”, relató.
Celeste Ayala
no vivió un momento de felicidad: “Estaba triste por la situación que
estaban pasando los nenes y pensaba en las nenas que tengo en casa. A veces uno
se queja de tan poco y esos nenes que no tienen nada, están sufriendo",
explicó Ayala, compungida por la penosa situación del bebé y sus hermanitos.
Celeste Jaqueline Ayala, numeraria del Comando de Patrullas de Berisso, realizaba un servicio de adicional en el hospital de Niños de La Plata, donde recorría el centro de salud.
Celeste Jaqueline Ayala, numeraria del Comando de Patrullas de Berisso, realizaba un servicio de adicional en el hospital de Niños de La Plata, donde recorría el centro de salud.
Las autoridades habían llevado a los chicos al
hospital ese miércoles, para que los médicos les dieran el visto bueno y
trasladarlos a un hogar.
Según contaron desde el Servicio Local
del municipio de Berisso, horas antes el Juzgado de Familia había resuelto separarlos de su mamá, que
atraviesa una situación de vulnerabilidad extrema.
“El mayor de los seis tiene 9 años. Tuvimos una
actuación de meses y lamentablemente no pudimos recomponer la situación de la
mamá", especificaron desde el municipio.
El seguimiento de esta familia comenzó meses
atrás, cuando la mujer se acercó a una unidad sanitaria a pedir ayuda para
poder darles de comer. Fuente TN
POSTEADO:
16-08-2018
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